Los 30 activistas de Greenpeace detenidos en Rusia luego de que protestaran frente a una plataforma petrolera en el Ártico, continúan en la misma prisión, confirmó a Infoblancosobrenegro María Luz Pérez Orsi, hermana de Hernán, uno de los dos argentinos que integraban la expedición el pasado 18 de septiembre.

Según información obtenida por los familiares a través del consulado argentino, los tripulantes del barco de Greenpeace Arctic Sunrise permanecen todavía en una cárcel de Murmansk, pese a que se había informado que los mismos habían sido traslados a San Petersburgo.

Hernán Pérez Orsi (40), Marino Mercante y Segundo Oficial de la embarcación, y Camila Speziale (21) activista, permanecen detenidos y acusados de Hooliganismo, un delito cuya pena asciende a 7 años de prisión: “Según me informaron desde el consulado, no pueden estar acusados de Piratería y Hooliganismo al mismo tiempo; por ello, el delito que se les imputa ahora es del segundo”, aclaró a Infoblancosobrenegro María Luz, quien vive junto a su familia en Mar del Plata.

Es preciso señalar, además, que Hernán Pérez Orsi es el único detenido de la tripulación de Greenpeace que no está acusado de “Peligrosidad” como el resto de sus compañeros.

Los ecologistas en prisión, de varias nacionalidades como norteamericanos, franceses, británicos, rusos, suecos, italianos y polacos, entre otros, buscan que sus respectivos gobiernos influyan sobre la Justicia rusa para que los dejen en libertad el próximo 24 de noviembre, cuando se cumplen los dos meses de la llegada de los prisioneros al Puerto de Murmansk.

María Luz, quien se mostró agradecida con Greenpeace y con la Cancillería Argentina por el apoyo a los apresados, confesó que en los próximos días viajarán a Rusia su cuñada, Magalí Malig, y su sobrina de un año de edad, Julia Pérez Orsi: “Estamos realizando todas las gestiones para que mi cuñada pueda visitar a mi hermano en la cárcel dado que al no estar casados no puede ingresar a la prisión, según las leyes rusas. La única que está habilitada es mi sobrinita porque hay un vínculo legal con el detenido. La constancia de convivencia, en este caso, no sirve. La Cancillería y Greenpeace, a través de sus abogados, están viendo la manera de solucionarlo”, aclaró María Luz.

Los 30 activistas ecologistas fueron detenidos cuando protestaban frente a la plataforma petrolera de Gazprom, llamada “El Prirazlomnaya”, considerada como la primera que podría iniciar la producción de petróleo en los hielos del Ártico.