Pese a los anuncios que realizaron ayer el ministro Granados y el pedido del gobernador Daniel Scioli, la policía bonaerense, en reclamo de mejoras salariales se acuarteló este domingo, complicando el desarrollo del partido Estudiantes-Tigre, que debió negociar con los efectivos una cantidad mínima de efectivos para garantizar la seguridad en la cancha.

Finalmente, tal como estaba previsto, el partido se jugará a las 17, y adelantaron la apertura de las puertas para asegurar el ingreso al estadio, aunque se desconocen la cantidad de efectivos que estarán presentes durante la jornada.

En estos momentos, las autoridades provinciales se encuentran dialogando con los cabecillas de la protesta policial, en un clima de extrema tensión, y es seguido muy de cerca por toda la dirigencia política, la nueva ministra de Seguridad Cecilia Rodriguez y el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni.

Según trascendió, desde las 11 de la mañana los familiares de los efectivos se hicieron presentes en la intersección de la avenida 1 y 59 para reclamar por un aumento que llevaría el básico a 10 mil pesos.

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