En la Dirección de Educación Superior de la Dirección General de Escuelas de la provincia los empleados administrativos mantuvieron un reclamo durante más de 2 meses. La demanda consistía principalmente en un incremento salarial para los trabajadores que menos cobran, cuyos sueldos rondan los 8.900 pesos mensuales.

A principio de este mes, Marcelo Ardeti, empleado de esa dirección y afilado a ATE fue llamado por el director del área, Leandro Goroyezky, para proponer un acuerdo.

Según Ardeti, el funcionario comentó durante el encuentro que por conversaciones con el Director General Alejandro Finoquiaro podía ofrecer una mejora para fin de año: el “beneficio” consistía en otorgar mil pesos a cada trabajador en concepto de horas extras, que se cobrarían el primer día hábil del mes de diciembre. Luego de discutirlo en asamblea los empleados resolvieron acordar por esa suma.

“Los pasos luego se fueron dando por vía administrativa con total normalidad” relató Ardeti a Blanco sobre Negro. “Memos emitidos, firmados y recibidos, la carga mensual de horas en tiempo y forma con todas las oficinas involucradas en consonancia con el acuerdo alcanzado, todo bien hasta el viernes 25, cuando por pura casualidad gente del sector vio en la pantalla del sistema de informática host que desde otra oficina (y sin mediar directiva de la Dirección de Superior) se retiró del pago la magra suma que se había acordado abonar”, detalló.

El delegado también explicó: "Rompieron un acuerdo obviando pasos administrativos legales y sin ninguna razón. Los compañeros ya tenían hasta pensado qué cuentas pagar con esos pocos pesos conseguidos, y se los sacaron de los bolsillos. Sentimos que la mentira es la regla y que se trata de esconder lo más posible”.

En una crítica en referencia al retraso salarial entre los empleados bonaerenses, Ardeti señaló: “Los tarifazos y la inflación se comen nuestro sueldo, la oferta paritaria de (María Eugenia) Vidal sería irrisoria, pero es trágica, estamos muy por debajo de la linea de la pobreza y ellos encima se burlan. Propusieron un acuerdo, nosotros lo cumplimos, están cumplimentados todos los pasos administrativos realizados y firmados, la carga para el cobro se realizó con todos los pasos necesarios y fueron aprobados por la Dirección General de Administración y la Dirección de Educación Superior”.

Por último, el delegado advirtió a Blanco sobre Negro: ”Esta decisión arbitraria y maliciosa puede traer consecuencias, y hacemos totalmente responsable de éstas a las autoridades de la Dirección de Educación Superior, a Miguel Garofalo, representante de Negociaciones Colectivas de la DGCyE, y al director (Alejandro) Finoquiaro”.