Ambos dirigentes marcaron, además, “diferencias” con respecto a la agenda del Gobierno y criticaron al kirchnerismo. Es el mentado “camino del medio”, o una suerte de “tercera posición” entre, como suelen decir ambas figuras, “el pasado de la corrupción kirchnerista y el presente del ajuste macrista”.

El proceso de confluencia entre ambas fuerzas políticas comenzó hace meses, y fue consolidándose en la medida en que el Frente para la Victoria fue recomponiéndose tras el liderazgo de CFK, y Cambiemos adoptó indisimuladamente un perfil de coalición de controderecha. Pese a las tensiones que hay en ambos polos del electorado, y en donde se expresan variados matices, macrismo y cristinismo se convirtieron en dos polos que se retroalimentan en un escenario de pujas discursivas, políticas, legislativas y judiciales que han sido las delicias de la telepolítica.

“El camino del medio no existe” se convirtió en una frase recurrente durante los últimos meses. Pero la gran mayoría de las encuestas parecen hasta ahora contrariar esa teoría. Stolbizer pudo mantener una imagen de dirigente moderna y honesta, con llegada a sectores medios que votaron a Cambiemos, y Massa logró contener al variopinto Frente Renovador y agregar el apoyo de peronistas que ven en su figura la posibilidad de construir una nueva “mayoría progresista de corte nacional y popular” como lo definió un alto dirigente.

En este escenario que, salvo en los grandes medios (todos colonizados por la pauta oficial). se veía venir, en Cambiemos sigue abierto el interrogante de cuál será la figura que presentará al electorado, y cuánto podría ayudar en la instalación de las listas bonaerenses la gobernadora María Eugenia Vidal. Se sabe que en política la buena imagen no es contagiosa ni garantía de potencia electoral.

“Nos damos la libertad de no coincidir y de tener entre los dos espacios políticos una agenda de trabajo en común en el Congreso. Tenemos una mecánica de consulta permanente”, señaló Massa durante el programa de Canal 13. Luego añadió: “Veo la situación con preocupación, hubo despidos, aumentos en los servicios públicos, peajes y ahora habrá incrementos en la canasta escolar. Así, a la gente no le alcanza para vivir. El Gobierno se preocupa de la macroeconomía y se olvida de la realidad de los trabajadores”.

Por su parte, Stolbizer explicó: “Acompañamos al Gobierno en las leyes que necesitaba como el acuerdo con los holdouts y el presupuesto, pero marcamos nuestras diferencias con el tema ganancias. Pusimos un límite y propusimos una agenda social distinta a la del oficialismo”.

La presentación que compartieron Massa y Stolbizer ya se conocía en las horas previas al programa, y tuvo un alto impacto con el correr de las horas del domingo.