El jueves pasado el legislador de Pehuajó presentó un Pedido de Informes a la Legislatura Provincial con el propósito de que el Poder Ejecutivo detalle cuánta es la cantidad de agua que ingresa actualmente a la provincia de Buenos Aires desde La Pampa y Córdoba. Además, exige que expliquen cómo está funcionando la vigilancia policial en el “Camino del Meridiano”.

Las inundaciones que afectan actualmente al noroeste bonaerense no tienen como causa exclusiva las excesivas lluvias caídas en los últimos meses en la zona. Para analizar la situación, no debe soslayarse el agua que ingresa a Buenos Aires desde La Pampa y Córdoba, a través de los desbordes del Rio V, el cual nace en San Luis pero llega a nuestra provincia por distintas canalizaciones.

En ese marco, el diputado del FPV-PJ Avelino Zurro presentó hace pocas horas en la Legislatura Provincial un proyecto solicitando informes con el propósito de que el gobierno de María Eugenia Vidal brinde explicaciones sobre la cantidad de agua que está ingresando a la provincia de Buenos Aires desde La Pampa y Córdoba, y aclare si la misma está en consonancia con lo establecido por la Justicia: “Informe si estas cifras corresponden y están enmarcadas dentro de lo establecido por la Corte Suprema de Justicia en el año 1984 donde se establece que el máximo permitido de superficie de escurrimiento es de 17,19 m2, lo que en términos hidráulicos ha sido considerado por las jurisdicciones afectadas como un caudal máximo admisible de 15 m3/s”, refiere el proyecto en uno de sus párrafos.

El Rio V nace en San Luis y desemboca en la Laguna Amarga en el Sur de Córdoba, pero en periodos muy húmedos y de excesivas lluvias, sus aguas llegan hasta La Pampa y hacia el noroeste bonaerense a través de distintas canalizaciones; allí comienza el problema en torno a quien debe quedarse con el agua.

En ese marco, la Justicia estableció la cantidad que debe pasar desde Córdoba a La Pampa y desde esta provincia a Buenos Aires, aunque muchas veces los canales clandestinos y la acción unilateral de los gobiernos alteran el equilibrio fijado en el fallo.

Es preciso destacar que gracias a estas obras, el Río V pasó de ser un río de cuenca endorreica, es decir que no tiene salida al mar, a uno de cuenca exorreica, dado que la masa hídrica que nace en San Luis termina en periodos de inundaciones en el Río Salado, en la zona del partido bonaerense de Bragado.

El Camino del Meridiano

El legislador de Pehuajo, que viene monitoreando la situación hídrica en el noroeste bonaerense desde el año pasado, también exigió explicaciones en torno al Camino del Meridiano.

En el escrito, Zurro indaga si como consecuencia del aumento en el ingreso de agua desde La Pampa hacia Buenos Aires el mencionado camino rural se reforzó y si la Policía Bonaerense, que montó vigilancia en el sector para evitar canalizaciones clandestinas y problemas de jurisdicción con trabajos hídricos no autorizados, detectó actividades sospechosas.

El Camino del Meridiano enlaza las localidades de Banderaló y Villa Sauce, en el partido de General Villegas, y es un límite natural entre las provincias de Buenos Aires y La Pampa en esa región. Considerado por el gobierno pampeano como un tapón al avance natural del agua, el gobernador Carlos Verna decidió el año pasado, en medio de las inundaciones, abrirlo para que circulara el agua desde el lado pampeano hacia el noroeste bonaerense. Esa decisión generó tensiones con los vecinos bonaerenses de Villa Sauce y Sansinema y el hecho es recordado por un feroz represión policial que se desató por causa de este conflicto.