En diálogo con Info Blanco Sobre Negro, el vicedecano de la Facultad de Ciencias Exactas, Patricio De Urraza, explicó: “El Congreso es un punto de encuentro de los distintos actores sociales y académicos que vienen trabajando el tema del uso terapeútico del cannabis. Para el ámbito académico es un tema bastante nuevo, hay muy pocos grupos de investigación. En la Universidad de La Plata tomamos la posta con el doctor Marcelo Morante que es un precursor en Argentina y nos hemos sumado varias unidades académicas”.

El Congreso fue declarado de interés municipal por el Concejo Deliberante de La Plata. El mismo tendrá lugar del 21 al 23 de junio en la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires y en las sedes de las facultades intervinientes.

“La idea es tratar de incidir como se aborda este tema que puede ser conflictivo desde el punto de vista cultural pero que tiene comprobado científicamente que el aceite de cannabis es efectivo para distintos tratamientos”, destacó De Urraza.

“En Exactas tenemos un proyecto de extensión aprobado el año pasado que surgió a demanda de los pacientes para saber cómo están compuestos los extractos que se hacen en forma casera. Hay muchos pacientes que a pesar de que esto es clandestino están cultivando y están produciendo aceite en sus casas”, aseguró el vicedecano.

“No saben cómo está compuesto el aceite pero notan que tiene un efecto positivo. Nuestro proyecto analiza esos extractos y da certezas sobre los compuestos”, agregó.

En mayo del año pasado, la Facultad de Ciencias Exactas hizo entrega al presidente de la UNLP de un proyecto impulsado por el Laboratorio de Investigación y Desarrollo de Bioactivos para la producción de cannabinoides a partir de la extracción, purificación e identificación de Cannabis Sativa L, orientado a obtener cannabidiol (CBD), compuesto al cual se le asignan actividad anticonvulsiva, con la menor presencia de delta-9-tetrahidro-cannabinol (THC), asociado al efecto psicoactivo. La ley aprobada recientemente habilita a los laboratorios públicos de medicamentos a producir aceite de cannabis.

“Hay tres compuestos principalmente activos. Los extractos varían porque depende de la planta, de la luz que recibió y muchas otras condiciones. Hay una gran variedad y eso es lo que enriquece las posibilidades de tratamiento, no se puede reducir a un extracto en particular porque se pierde a posibilidad de tratar distintas patologías”, explico De Urraza.

Sobre la complejidad de la producción de aceite, el vicedecano aseguró: “Desde el momento que es un extracto que se hace en forma casera a partir de una planta se puede pensar que no tiene complejidad lo que hoy se hace. Regularlo y normativizarlo implica otro nivel de complejidad”.