Las elecciones de la UNLP que culminarán este viernes con la votación de los no docentes tienen una gran relevancia porque definen la conformación de los Consejos Directivos de cada una de las facultades, que luego en marzo del año próximo a sus respectivos decanos para el período 2018-2022. A priori, en la única unidad donde todavía está abierta la disputa por el decanato es en Ciencias Agrarias y Forestales, donde el kirchnerismo y el radicalismo pelean palmo a palmo.

Las elecciones en Profesores, Estudiantes y Graduados definió en gran parte la conformación de los próximos Consejos Directivos. Con el reparto actual, en las únicas facultades donde habrá cambio de conducción del decanato será en Medicina, donde será desplazada Hoja de Roble, y en el Observatorio, donde el radicalismo se pudo imponer al INTI.

En Agrarias, la actual decana Sandra Sharry, referenciada con el kirchnerismo, intentará continuar en el decanato para lo que sólo necesitará 9 votos porque accedió a ese lugar a partir de la renuncia del ex decano Daniel Scatturice. Enfrente, el radicalismo intenta conseguir los consejeros suficientes para imponer un candidato propio que no está definido pero que probablemente sea Pedro Balatti.

Actualmente, el reformismo cuenta con 8 consejeros y el peronismo suma 7. En este marco, la elección de trabajadores no docentes que se realizará el viernes será clave para definir la victoria del radicalismo o dejar la situación en un virtual empate ya que el Consejo Directivo está integrado por 16 bancas.

La candidatura de Sharry cuenta con el apoyo de la lista de docentes que obtuvo 5 consejeros por la mayoría, la banca estudiantil por la minoría que obtuvo La Mella, y el representante de los Jefes de Trabajos Prácticos. En tanto el radicalismo se hizo fuerte en alumnos (4) y en graduados (2), más la minoría en Profesores (2).

Según pudo averiguar Info BLANCO SOBRE NEGRO, en no docentes se enfrentarán dos sectores gremiales. Por un lado, la lista oficialista referenciada con el sindicato ATULP y por el otro un armado que viene creciendo y que es más cercano a ATE que está intentando hacer pie en la Universidad.

Ninguno de los dos espacios garantiza su apoyo a alguno de los sectores que se disputan el decanato, por lo que las consecuencias del resultado del viernes no se podrá leer de inmediato y dependerá de las negociaciones que se den en meses venideros.

En caso de que se diera un empate en el Consejo Directivo, la situación se podría tornar por demás engorrosa como sucedió años atrás en Exactas donde después de varias votaciones en las que se repetía la paridad se definió que cada espacio conduzca la facultad por dos años, acuerdo que finalmente no se cumplió porque en elecciones posteriores hubo cambios en la correlación de fuerzas y Carlos Naon pudo completar su segundo mandato.