“Todas estas medidas para combatir el juego ilegal y restringir el juego legal tienen que ver con que creemos que el juego no es algo bueno para los bonaerenses. Muchos de los que están escuchando seguramente tienen un familiar o un amigo que sufre ludopatía”, dijo la gobernadora acompañada por el Presidente del Instituto de Loterías y Casinos Matías Lanusse y el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo.

Los anuncios de este miércoles realizados por María Eugenia Vidal se dividen en dos. Por un lado se comunicó el cierre de los casinos de Necochea, Mar de Ajó y Valeria del Mar, y también la sala de bingo de Temperley, y por el otro se informó sobre un llamado a licitación pública para la administración de 3860 máquinas tragamonedas que funcionan en siete de los doce casinos provinciales, luego de más de 20 años de adjudicaciones directas y prórrogas.

Info BLANCO SOBRE NEGRO dialogó con Marcelo Díaz, ex diputado provincial del GEN y referente en esta temática dentro del espacio liderado por Magarita Stolbizer, que aseguró: “Las medidas son buenas pero no lo tanto como lo anuncian. Los casinos de Necochea y Valeria del Mar tenían muy poca actividad y el de Mar de Ajo directamente no funcionaba, además estaban ubicados en lugares de esparcimiento”, y sentenció: “Van en el sentido correcto pero están amplificadas por el marketing del gobierno”.

“La medida más importante para disminuir la oferta del juego sería limitar los horarios de juego. Actualmente, los bingos y casinos pueden permanecer abiertos las 24 horas del día. Lo lógico sería que sólo estén en funcionamiento durante la noche”, señaló.

Además pidió que se pongan “todos los esfuerzos en no permitir la ampliación del juego online que tiene efectos muy nocivos porque reduce la edad de los jugadores”. Actualmente, se necesitan tarjetas de crédito internacionales para poder apostar en sitios de internet.

“Además sería importante cerrar los clubes para fumadores que se armaron dentro de las salas como una forma de burlar ley que prohíbe fumar en bingos y locales gastronómicos”, agregó el autor de la ley aprobada en 2012 para extender la norma anti tabaco a estos lugares que originalmente habían quedado excluidos de la misma.

Respecto al llamado a licitación de 3860 máquinas tragamonedas, el diputado provincial aseguró que es una “buena medida” porque le "agrega transparencia a un sistema que siempre estuvo vinculado de manera oscura con el financiamiento de la política”, aunque pidió que las instituciones de bien público que figuran como concesionarias sean organizaciones que “realmente lo necesiten y no clubes de fútbol”.

Por otra parte, Díaz se refirió al cierre de la sala de bingo de Temperley que la empresa Codere buscaba trasladar a un predio cercano al Puente La Noria, a metros de la feria La Salada y de la General Paz. “Lo celebro pero se hizo tarde y ahora quedó habilitada la posibilidad de que la empresa haga un juicio millonario contra la Provincia”, comentó.

Asimismo, el diputado provincial consideró que otra medida importante para tratar la ludopatía sería trasladar el “Programa de Prevención y Asistencia al Juego Compulsivo” del Instituto Provincial de Loterías y Casinos al Ministerio de Salud.