La Defensoría del Pueblo bonaerense manifestó su “preocupación ante la decisión del Ministerio de Defensa de la Nación de reimplantar la instrucción en el uso de armas letales a los alumnos de tercero a sexto año de los liceos”.

La capacitación en el uso de armas para los estudiantes de los liceos había sido eliminada con la implementación del Plan de Liceos en el año 2010. Esa medida había recibido el aval de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

La Defensoría del Pueblo bonaerense consideró un “retroceso” que adolescentes de entre 14 y 17 años reciban instrucción con carabinas calibre 22.

“Es una medida que genera preocupación porque afecta a niños, niñas y adolescentes protegidos por los tratados internacionales e integrantes de un establecimiento educativo cuya función principal es formar civiles que luego podrían integrar la reserva que podría o no ser continuada en carreras militares”, sostuvo el defensor del Pueblo adjunto, Walter Martello.

Y agregó: “La decisión del gobierno nacional va en contra de la sugerencia de la ONU para que el Estado prosiga sus esfuerzos de reforma de las academias militares, coordinando sus planes de estudio con el ministerio de Educación, y que la utilización de armas de fuego sea a partir de los 17 años, para al sólo efecto de dar cumplimiento a las condiciones de tiro”.

El principal argumento expuesto en la Resolución 1270/2017 es que “uno de los propósitos de la creación de los liceos militares fue contribuir a la formación del personal de la Reserva”, en referencia al conjunto personas con instrucción militar que pueden ser movilizados por las Fuerzas Armadas a pesar de no estar en servicio activo

La resolución firmada por Aguad deroga también otra serie de criterios que buscaban modernizar la formación en los liceos favoreciendo, por ejemplo, la externación de los alumnos, la posibilidad de que compartieran las aulas con chicos que no cumplen el régimen de internado, la eliminación de la catequesis como materia obligatoria y la protección del derecho de los alumnos a decidir por sí mismos si llegados a la mayoría de edad querían integrar la Reserva de las Fuerzas Armadas.