Tras el revalúo fiscal para actualizar el valor de las propiedades comenzaron a llegarle a los bonaerenses las boletas del impuesto inmobiliario con subas de hasta el 56%.

La actualización de los montos trae aparejado que muchos inmuebles de vecinos de clase media que hasta ahora no estaban comprendidos en la base de contribuyentes del impuesto a los Bienes Personales, ahora tendrán que abonarlo y soportar esa nueva carga impositiva.

Ante esta situación, el Frente Renovador reiteró su rechazo con la suba y le recordó a Vidal que la medida “afecta en forma directa el bolsillo de los bonaerenses, sumado a los aumentos en los combustibles, los tarifazos en los servicios públicos como la luz, el agua y el gas".

“El fiel reflejo de la situación económica de las familias bonaerenses se nota en Mar de Plata, donde a pesar de la campaña gigantesca de descuentos en pasajes aéreos, supermercados, gastronomía, y demás”, resaltaron desde el massismo.

Cabe recordar que en la discusión de la Ley Fiscal Impositiva que contemplaba una suba significativa de los impuestos inmobiliario rural y urbano, aprobada en diciembre por la Legislatura provincial, el bloque de Sergio Massa votó en contra los artículos que modifican la base de cálculo incrementando las valuaciones fiscales del impuesto inmobiliario durante el tratamiento de la Ley Fiscal Impositiva 2018 y anticipó “el flagelo que le significarían a los bonaerenses esas subas”.