Ana Raquel Guerrero llegó a La Plata desde Tucumán en 1978 con la esperanza de conseguir un trabajo. “Empecé limpiando en casas de familias pero en 1981 leí en el diario que tomarían mujeres para barrer en las calles. Fui a inscribirme y me llevaron la ropa a mi casa”, contó.

“En todo el país, ese trabajo lo realizaban varones, por eso era muy llamativo para la gente vernos barrer en la calle. Entramos 80 mujeres, varios medios se acercaron a hacernos entrevistas. Fuimos las primeras mujeres de todo el país en comenzar a barrer. No sabíamos a qué gremios pertenecíamos, sólo que podíamos ganar un poco más que en casas de familias”, recordó.

“Una vivió una miseria, mi viejo siempre le debía al patrón porque le daban un crédito en mercadería y cuando llegaba fin de mes siempre le debíamos porque todos laburábamos en la zafra tucumana”, relató sobre su vida en su provincia natal.

Su vida dio un giro completo, a mediados en 1986 a partir de una visita de Hugo Moyano a La Plata, cuando se postulaba como secretario general del Sindicato de Choferes de Camiones, puesto que asumió un año después. “Convocó reuniones de mujeres, se realizaron elecciones y me eligieron como delegada del sector. Ahí me empecé a capacitar para lograr mejoras para mis compañeras. En ese momento eran muy poquitas las mujeres en el gremio, generalmente estaba sola en las reuniones”, contó Ana.

“Ahora tengo 36 años de antigüedad en la empresa y también muchos años de militancia en el gremio. Yo sé que los dirigentes pasamos pero lo que logramos queda”, remarcó la trabajadora y agregó: “En el ’89 se convocó a paritarias y se lograron muchos ítems que todavía están vigentes como la comida y algunos referidos a la mujer como el día femenino, un día de permiso pago para las mujeres en el mes”.

“Para mí fue muy fuerte venir a Buenos Aires y escucharlo a Hugo que te hablaba de derechos, de que se podía, y me jugué y me juego todos los días porque esto que una vez que empezó siempre avanzó, nunca hubo un retroceso”, señaló Ana y agregó: “Nunca retrocedimos, ni en los peores momentos de crisis, y en cualquier gobierno”.

Sobre los ’90 y el Movimiento de Trabajadores Argentinos (MTA), la trabajadora rememoró: “No faltaba a ninguna de las marchas. Cuando en el Congreso habían votado la Ley Banelco, recuerdo que Hugo dio un discurso con la voz quebrada. Es lo que más me quedó”, y continuó: “También me acuerdo que en una de esas marchas estábamos preparando la comida, vinieron los carros hidrantes y nos tiraron todo”.

Respecto a la Seccional La Plata donde se desempeña como secretaria de Actas destacó: “Miguel Forte ha tenido un trabajo importante y avanzó a grandes pasos. Trabajo muy bien políticamente y la seccional ha tenido un crecimiento muy grande, con más de 4 afiliados. Supo coordinar todo, la política ideológica con el trabajo de la mutual, la obra social y el sindicato”.

Sobre el grupo de barrenderas en la actualidad, Ana Raquel comentó: “En total no llegamos a 80. Antes había más pero cuando se municipalizaron las tareas a través de las cooperativas quedó un grupo muy reducido. Ellos cobran menos que un anticipo nuestro”.

“Hoy hay mujeres en transporte de caudales, barrido, logística, en el correo, también hay chicas que son choferes. La mujer hoy tiene un papel muy importante en la vida del gremio, creció mucho su participación”, destacó.

Su visita al Papa Francisco

Por último, Ana contó su satisfacción por haber podido conocer al Papa Francisco en el Vaticano. “Fue el broche de oro esa oportunidad única e irrepetible de ir a conocer al papa argentino. Estoy más que agradecida que haya hecho este reconocimiento en lo espiritual y en los valores que no tiene precio. Esto sobrepasa todo lo que la vida le puede haber dado a uno”, reconoció.

El encuentro con el Papa tuvo lugar el pasado 7 de octubre. “Participamos de la ceremonia en la plaza de San Pedro y después tuvimos una cena con el representante del Papa. Al Papa le alcance a tomar la mano por detrás de los compañeros”, contó.

“Fuimos en una misión con el compañero Maximiliano Acuña que tuvo un accidente. Por eso fuimos a acompañarlo con Marcelo Aparicio, Pablo Moyano, Walter Anchaval. Fue muy emocionante para el chico porque le da una camiseta del club para que le firme”, concluyó la mujer que desde hace más de 30 años barre las calles platenses.