Durante la visita Garro estuvo acompañado por el presidente de Aguas Bonaerenses Sociedad Anónima (ABSA), Raffaele Sardella, junto a quien presenció un cambio de cañería en la zona de 62 y 139. Ambos supervisaron las tareas y conversaron con algunos vecinos sobre la importancia y el avance de las obras.

Sobre los trabajos, Garro precisó: “Este barrio histórico pedía a gritos una solución ante la falta de presión, y a partir de esta obra va a tener siete veces más de agua que antes. Sabemos que falta mucho por hacer, pero estos hechos demuestran que para resolver los problemas de los platenses no hacen falta discursos, hace falta cumplir con la palabra y demostrarlo con acciones concretas todos los días”.

“El acceso al agua potable es un derecho que si no está garantizado pone en juego la salud pública, por eso junto a ABSA nos hicimos cargo de un tema clave y nos comprometimos a brindar respuestas por una complicación que tenían los vecinos desde hace muchos años”, valoró.

Por su parte, el titular de ABSA, Raffaele Sardella, detalló que “la obra prevé el cambio de cerca de seis mil metros de cañerías para lo que se ha invertido más de 65 millones de pesos en un año", y agregó: "Lo que se está haciendo acá lo vamos a seguir expandiendo en toda La Plata, tratando de ser más eficientes, y destinando los fondos al mantenimiento y a más inversiones”.

Según se precisó, los trabajos comprenden el recambio de cañerías desde las calles 131 a 161, y desde 52 a 72, y tienen como objetivo fundamental aumentar los caudales de agua, ya que hay caños que datan de la época fundacional.

Con ese objetivo se procedió a verificar los tapones en la red, empalmes obstruidos y válvulas fuera de servicio.

Cabe destacar que ya se cambiaron 3.900 metros de cañerías, mientras que 1200 metros se están ejecutando actualmente y los restantes 900 se proyectan para el mes de mayo.