Fotos: Habitar Argentina

El concierto marcará el debut en vivo de esta dupla. Será una experiencia inédita en el salón auditorio de la casa de calle 53 Nº 506, sede de la Fundación CEPA de arquitectura, urbanismo y medio ambiente.

Julián Rossini es compositor, productor de música y multiinstrumentista
nacido en la ciudad de Mar del Plata.

Es miembro estable de los proyectos: Nogal, Jai-Yia, Shaman y Los Pilares de la Creación, Los Bluyines, y Alma Negra. Además dirige la Orquesta de la Casita de los pibes e integra Bulevar 32 . “Una usina musical sentada frente al piano, que esta vez mostrará su costado acústico e intimista al frente del piano Steinway & Sons de la Casa Pesci”.

Toto Yulelé vendrá exclusivamente desde Uruguay a mostrar los nuevos estilos de la canción oriental. Es miembro del grupo uruguayo de rock independiente Limpiando Encontré Monedas, y como solista editó recientemente el album titulado “De cuando aluminé”.

El espectáculo comenzará a las 21 horas, “en punto”, advirtieron los organizadores. La entrada o bono contribución es de 150 pesos.

Sobre la Casa Pesci y el ciclo “Piano Nobile”:

La Casa Pesci, ubicada en calle 53 numero 506, es representativa del diseño arquitectónico de vivienda urbana, como expresión del equilibrio entre el contexto urbano y natural. Actualmente es sede de la Fundación CEPA (Centros de Estudios y Proyectación del Ambiente), una ONG creada en 1974.

El espacio que en su casa el arquitecto y urbanista Rubén Pesci imaginó y diseñó como su vivienda familiar, es ahora el ámbito en el que por estos días la Fundación CEPA desarrolla su actividad proyectual y brinda sus cursos y seminarios con la visión integradora del enfoque ambiental. Con un auditorio con capacidad para 50 personas, se propone también ahora como “una referencia dentro del mapa cultural que bulle en la ciudad de La Plata”.

La Casa Pesci sumó desde el año pasado una serie de propuestas culturales, como conciertos, ciclos de cine, o talleres de fotografía. Un piano de cola Stenwais & Sons se destaca y suena en todo el lugar, convirtiéndolo así en una de las atracciones de esta Casa que por su valor arquitectónico y urbanistico recibe visitas de contingentes y profesionales que recorren la innovadora obra que plantea traer el verde al centro de la ciudad.

Aldo Facho Dede escribió sobre la Casa en el sitio de Habitar Argentina:

El equipo de arquitectos de la Fundación CEPA, liderados por Rubén Pesci, han tenido desde su origen como sociedad una clara conciencia de la necesidad de buscar el equilibrio entre el medio ambiente, la ciudad y la arquitectura. El edificio lejos de sustentarse en sí mismo, se debe a la comprensión de su contexto, y se irgue para sumar al equilibrio entre la ocupación del hombre y la naturaleza. Los más pequeños detalles están tan relacionados con el lugar como el conjunto de la edificación.

La casa Pesci está entendida así. Demuestra, en su escala, que ser Moderno (coherente con su tiempo y lugar) no implica olvidar su contexto urbano y natural, como muchos críticos de fácil palabra denunciaron. La casa Pesci se debe a un exhaustivo análisis y comprensión de su contexto urbano, al entendimiento de las relaciones entre la calle y los edificios en La Plata: en el cómo disfrutar del frondoso verde de la ciudad sin ser molestado por las miradas indiscretas y ruido de los coches (como ya lo analizara Le Corbusier en la casa Curutchet). En la comprensión de las variaciones estacionarias, y en cómo sin hacer alardes tecnológicos poder controlar el calor intenso del verano y refugiarse del frío invernal. La casa Pesci está además pensada para crecer en el tiempo, el proyecto contempla la ampliación en etapas de tres niveles más, completando así la altura promedio de las edificaciones vecinas.

La terraza en planta primera sobre las cocheras funciona como filtro y marco para los espacios íntimos, que pueden de esta manera pueden tener su cara principal vidriada. El estar se proyecta visualmente en la terraza, pero distingue su función separándose físicamente. Los dormitorios tienen un espacio común de filtro con la luz de la calle donde estaban previstas las actividades de estudio y ocio. Finalmente en planta baja, bajando unos escalones, se ubica una gran sala de estudio, que fue ocupada por varios años por el equipo de la Fundación CEPA y quedó posteriormente para uso de la familia.Los arquitectos de CEPA toman con habilidad la lección de Le Corbusier en la casa Curutchet, analizan y comprenden el sentido de los componentes y utilizan esta experiencia para proyectar la casa. Es la forma como se debe aprender de la Arquitectura Moderna: no tomar los elementos formales para recomponerlos en otros edificios, sino analizar profundamente el sentido de éstos como lección para futuros proyectos.