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Información General | 6 jul 2018

El mejor latino de las WSOP

Se cumple un año del momento en que Damián Salas hizo historia para Argentina

En julio de 2017, el chascomunense alcanzaba la posición más alta para un jugador latinoamericano en la Era moderna de las Series Mundiales de Poker


Imagen: Pokernews

Estos días se disputa en la ciudad de Las Vegas el que es el campeonato de poker más importante del planeta, lo que sería el equivalente al Mundial de fútbol: las World Series of Poker (WSOP). Hace un año, la Albiceleste de los naipes tuvo mucha más fortuna de la que han tenido los de Sampaoli en Rusia 2018.

Damián Salas, natural de Chascomús, hizo soñar a todos los aficionados al poker de América Latina. Lograba meterse en la mesa final del principal torneo de las Series Mundiales. Las WSOP son un campeonato que se compone de distintas competencias, pero la más importante es el llamado Main Event. Tras superar varios días de juego y cientos de los mejores jugadores del mundo, finalmente sólo quedan 9 para la mesa final. Es extremadamente difícil alcanzar esa última fase pero, a sus 42 años, este abogado de profesión lo logró.

El chascomunense se coló entre la élite del poker mundial, formó parte del grupo de unos pocos elegidos y batalló por el título, aunque finalmente no pudo pasar de la séptima plaza.

Pese a no haber podido coronarse en Las Vegas, puede considerarse que Damián Salas ganó igualmente.

Las WSOP es un campeonato que fue fundado en 1970 por Benny Binion. Desde entonces, Johnny Moss y Stu Ungar son quienes más veces han ganado el Main Event, con sólo tres títulos cada uno, lo que da cuenta de la dificultad de lograr este título.

Moss y Ungar pertenecen a la vieja Era de las WSOP. Desde 2004, año en que el torneo pasó a manos de Caesars Entertainment Corporation, se considera una nueva etapa de este campeonato. En cierto modo se abrieron las puertas de los casinos. El poker online supuso una revolución que atrajo a un gran número de nuevos jugadores; los torneos multiplicaron la cantidad de participantes, haciendo que sea más difícil todavía llegar a la cima.

El costarricense Humberto Brenes alcanzó en 1988 el 4º puesto de la mesa final del Main Event. Ese resultado sigue siendo el mejor obtenido por un latino en la historia de las WSOP, aunque realmente no se puede comparar la competición de entonces con lo que es ahora.

En 2014, José Luís Velador, nacido en México, estuvo muy cerca de meterse en la mesa final, quedando décimo. Pero no fue hasta 2017 en que Damián Salas consiguió por fin que un representante procedente del Continente latinoamericano formase parte de ese selecto club.

Fue un momento histórico para el poker argentino y latinoamericano, y además no fue el único. Junto a Salas hubo otro argentino que se quedó cerca de la gloria en las WSOP. El bonaerense Richard Dubini terminó en el puesto 12, a punto de entrar también en la mesa final.

Además, Andrés Korn conseguía el segundo brazalete de las WSOP para Argentina, es decir, que ganó uno de los torneos del campeonato. El primero en conseguirlo fue Iván Lucá en 2015. Este puntaltense es uno de los mejores profesionales nacionales, uno de los componentes de la nueva ola de jugadores argentinos que están escribiendo la historia del poker latinoamericano.

Otro nombre destacado procede también de Buenos Aires, en este caso se trata de una mujer. María Constanza Lampropulos empezó a jugar un poco por acompañar a su pareja, el mencionado Lucá, pero ha acabado convirtiéndose en la mejor profesional del país; fue número uno del ránking de América Latina y llegó a estar en el Top 50 mundial. Son varios los logros que han catapultado a esta joven jugadora y sus ganancias rondan ya los tres millones de dólares. Estos días es una de los representantes nacionales en Las Vegas. Ojalá puedan seguir haciendo historia.

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