Durante el plenario en el Senado de la Nación por el debate de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, que ya tiene media sanción en Diputados, el fundador del CONIN cuestionó el uso de profilácticos porque, dijo que “no protegen de nada” y que quienes voten a favor “van a tener las manos manchadas de sangre de esas criaturas por este réquiem satánico”.

Desafiando verdades comprobadas por la ciencia hace décadas, el médico integrante del Opus Dei aseguró que los preservativos “fallan el 30% de las veces en el embarazo", y agregó: "Imagínense lo que puede pasar con el SIDA”.

Las palabras de Albino generaron el repudio de toda la comunidad médica, el movimiento de mujeres y obligó a referente de distintos organismos de salud a salir a aclarar que el preservativo es un método eficaz de profilaxis. Incluso, el ministro de Salud de la Nación, Adolfo Rubinstein, tildó los dichos del pediatra de “barbaridades” y “disparates”.

Albino fue nombrado “Huésped de Honor Extraordinario” de la UNLP en 2014 en reconocimiento a extenso trabajo contra la desnutrición infantil. En ese momento, dio una conferencia titulada “Invertir en inteligencia” en el Aula Magna de la Facultad de Medicina, en el marco de la conmemoración de los 80 aniversario de esa unidad académica.

Ahora, el consejero superior por el claustro estudiantil de Arquitectura, Fernando López Plá, presentó un proyecto para que la UNLP se dé marcha atrás con esa distinción.

En diálogo con Info BLANCO SOBRE NEGRO, la ex consejera Julieta Rosas e impulsora de esta iniciativa aseguró: “Creemos que con el repudio general que causaron los dichos de Albino, no será muy difícil que el resto de los consejeros se sumen a este proyecto”.

“Sus dichos expresan un oscurantismo reaccionario y una profunda oposición a los derechos de las mujeres, en particular a la legalización del aborto y el acceso a la educación y la salud sexual y reproductiva”, argumentó López Plá, militante del Partido Obrero.

El proyecto también llama a que el Estado anule los convenios que hoy tiene con la Fundación CONIN, dirigida por Albino. “Esta fundación recibe subsidios del Estado por 120 millones, y así se sostiene una organización de preceptos clericales y anticientíficos que trabaja con las familias más golpeadas por los abortos clandestinos y las enfermedades de transmisión sexual”, agregó el estudiante de Arquitectura.