

“Si bien hay muchos factores complejos en juego con los fenómenos meteorológicos extremos, lo que estamos experimentando es consistente con las predicciones de un mundo afectado por el cambio climático”, dijo Bunny Mcdiarmid, directora ejecutiva de Greenpeace Internacional.
Este clima extremo será lo habitual en el futuro, según las predicciones de la Organización Mundial de la Meteorología (OMM), que vincula el cambio climático con estos fenómenos de olas de calor, temperaturas récord y sequía o lluvias por debajo de la media. “La propagación de estas olas de calor apunta al cambio climático como un factor claro, aún cuando tenemos 1 grado de calentamiento desde la era preindustrial. La perspectiva de lo que podría suceder si las temperaturas suben más allá del objetivo de 1,5 grados establecidos en el acuerdo climático de París es impensada. Necesitamos controlar el cambio climático de manera urgente para prevenir eventos meteorológicos extremos en el futuro y salvar vidas”, agregó Mcdiarmid.
A nivel local, el panorama no mejora. “El cambio climático está aquí, está sucediendo ahora, y tiene grandes efectos en toda la Argentina: estamos viendo un aumento de las lluvias fuera de las estaciones, problemas en el suelo, y sequías extremas", aseguró Ingo Boltz, coordinador de la campaña de Clima y Energía de Greenpeace Andino. “Sin embargo, pese a la urgencia de acelerar la transición hacia energías limpias y renovables, el gobierno nacional insiste en proyectos como Vaca Muerta. Abrir la segunda reserva de gas y la cuarta reserva de petróleo no convencional más grandes del mundo es condenar al país a impactos climáticos devastadores”, concluyó.
Gentileza: GREENPEACE Argentina