martes 19 de marzo de 2024 - Edición Nº -1931

Información General | 16 nov 2018

Opinión

"La Plata: un debate sobre el modelo de gestión": reflexiones en torno al aniversario de la Ciudad

Por Gastón Crespo, concejal del partido GEN.


En este nuevo aniversario de nuestra ciudad, encontramos una oportunidad más para replantearnos el modo en que vamos a trabajar, cada uno desde su lugar, para que la ciudad y la región puedan avanzar y desarrollarse incluyendo al conjunto de la sociedad.

Hace años que La Plata crece sin planificación, con todas las consecuencias que esto trae aparejado para los vecinos, que hoy padecen la falta de infraestructura y el grave deterioro de los servicios básicos. En este sentido, a pesar de los sucesivos cambios de gestión municipal, los problemas estructurales continúan y, lo que es peor, se acrecientan conforme sigue pasando el tiempo.

Considero que, para atender estas cuestiones, necesitamos distinguir dos tipos de problemas: los urgentes y los importantes. Los primeros son los que requieren solución inmediata ya que afectan a diario a los vecinos, poniendo en riesgo su salud, su bienestar e incluso su vida; mientras que los segundos exigen un debate amplio y un análisis a largo plazo que permita visualizar la ciudad hacia el futuro.

En cuanto a los problemas urgentes, cabe mencionar como ejemplo la situación de la seguridad vial. La Plata es la ciudad del país con más muertes por accidentes de tránsito por habitante. En lo que va del año ya estamos ante un nuevo récord histórico.

Frente a este panorama, vamos a seguir insistiendo en la necesidad de declarar la Emergencia en Seguridad Vial, que permita destinar mayores recursos humanos y económicos al control del tránsito, el mejoramiento de las calles, luminaria y señalización, así como también una mayor concientización y educación vial en las escuelas y otros ámbitos.

Asimismo, el sistema de transporte público actual no contribuye en lo más mínimo a aliviar el problema del tránsito, ya que presenta serias deficiencias, entre las que los usuarios denuncian grandes demoras, pésimo servicio y que no llegan a todos los barrios. ¿Por qué en una ciudad que ha sido diseñada originalmente para facilitar la movilidad y la accesibilidad de las personas que la habitan y recorren, tenemos que padecer semejante ineficiencia?

Necesitamos revisar todos los contratos de las empresas consecionarias -que han contado con la complicidad de las autoridades que las deben controlar -, y al mismo tiempo, plantearnos un nuevo sistema de movilidad urbana moderna, no contaminante, inclusiva y diversificada, sumando nuevos medios de transporte, como tranvía o trolebus, bicisendas y circuitos peatonales.

Como es sabido, el problema de los servicios públicos no se reduce únicamente al tema del transporte. Lo mismo ocurre con el agua potable, las cloacas, los desagües pluviales y el servicio eléctrico. La infraestructura está colapsada por la construcción desmedida y sin control que se ha dado en la ciudad en el último tiempo y, a su vez, no ha habido inversiones ni mantenimiento suficientes.

Como consecuencia de ello, los platenses nos encontramos en un estado de alerta permanente y nos vemos obligados a vivir en condiciones insalubres y, en muchos casos, poco dignas. Es fundamental también en este tema tomar la iniciativa en la elaboración de planes integrales que den solución a los reclamos actuales y que prevean el mejoramiento y ampliación de los servicios en el mediano plazo.

Todas estas cuestiones requieren respuestas inmediatas, pero no pueden ser tratadas de manera aislada. Y a ello me refiero cuando hablo de los problemas importantes. Esto incluye, por ejemplo, revisar el Código de Ordenamiento Urbano y debatir un Plan Urbano Ambiental, pensando hacia dónde va a crecer la ciudad y cómo vamos a incluir a todos los sectores.

La Plata es una gran incubadora de profesionales y expertos, cuenta con el cordón frutihortícola más importante del país, es una ciudad con un gran patrimonio histórico e importantes servicios gastronómicos y culturales. Necesitamos aprovechar al máximo este potencial para posicionarnos como una ciudad productiva, inclusiva y amigable con el medio ambiente.

Mi propuesta es iniciar ya este debate con todos los sectores sociales a través de audiencias públicas, asambleas barriales y foros participativos, y construir así, de manera colectiva, el modelo de ciudad y de región que queremos para nosotros y para las futuras generaciones.

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