El ministro Lino Barañao señaló que un equipo de investigadores argentinos “encontró una explicación para un fenómeno conocido que es que los tumores después de un tiempo logran escapar a las distintas terapias antitumorales. En particular hay una de ellas que se basa en impedirle al tumor que genere vasos sanguíneos y por los tanto que carezca del oxígeno necesario para crecer”.

“Eso se hace con un anticuerpo monoclonal que vende una compañía que neutraliza un factor que es el que promueve la generación de estos vasos sanguíneos. Hay algunos casos en que los tumores son refractarios a este tratamiento y no se sabía por qué”, explicó el titular de la cartera científica.
Barañao explicó que lo que encontró el grupo de científicos del Conicet y de la UBA encabezados por el investigador Gabriel Rabinobich, es que “hay una segunda proteína que no se conocía que puede ejercer un rol similar por un mecanismo paralelo”.

“Lo que los doctores proponen continuó el funcionario es que neutralizando esta segunda proteína, y de hecho lo han demostrado, se logra que los tumores se vuelvan sensibles al tratamiento”.

Barañao señaló que a partir de este descubrimiento “lo que se propone es una terapia complementaria al tratamiento tradicional que lo haría más efectivo”.

El ministro destacó que el hallazgo ya “ha sido patentado atreves del Conicet”, y que “se está negociando con diferentes empresas farmacéuticas para poder producirlo a nivel comercial” ya que va a “requerir inversiones de 60 millones de dólares y algunos años de validación”.

Señaló, además que este descubrimiento, ubica a la Argentina entre los países que “están produciendo avances significativos en la lucha contra el cáncer” y destacó que esto se “reproduce en otra aéreas de conocimientos luego de 10 años de inversión continua”.