En la imagen: Fabián Tomasi, víctima fatal por el uso de agroquímicos

Lo publicamos oportunamente en Info BLANCO SOBRE NEGRO en la nota “Video: en una escuela rural de Chivilcoy los aviones fumigan en pleno horario de clases”. El tema reviste gravedad y es absurdo que todavía exista un vacío legal en la Provincia de Buenos Aires que no resuelva la cuestión de fondo. Consultamos a Casamiquela sobre el desarrollo de este debate. “No quiero que se genere una falsa contradicción entre lo que decimos nosotros y los productores pequeños y medianos. Estamos a favor de ellos, porque son las principales víctimas: mandan sus hijos a las escuelas fumigadas, sufren la contaminación del agua y viven en el campo que cultivan”, advirtió la letrada.

No obstante volvió a insistir sobre la falta de regulaciones sobre el uso de agroquímicos, y lanzó fuertes críticas al Presidente de la Nación, Mauricio Macri: “Fue a Ente Ríos y cuestionó a jueces que habían establecido un limite para fumigar. Es más, a los agrotóxicos los mencionó como ‘fertilizantes’ para de alguna manera edulcorar su discurso y menguar el impacto social que tiene esta problemática en la que se pone en juego la vida de las personas”, expresó en diálogo con este portal.

Casamiquela también señaló que “el gobierno acepta un fallo que establece en Entre Ríos una limitación para la fumigaciones avícolas, es decir, que puso más controles a los aviones que arrojan agrotóxicos sobre los criaderos de pollos. Es evidente que el Presidente se esmera por cuidar la rentabilidad de los productores. Pero al mismo tiempo critica que se prohíba fumigar cerca de las escuelas. O sea, de acuerdo a ese razonamiento no se pueden lanzar tóxicos arriba de las aves porque se mueren, pero con los pibes no pasa nada, si afecta su salud no hay problemas . Es terrible que esto pase inadvertido, o que se quiera ocultar esta injusticia que permite que la que la rentabilidad prevalezca sobre la vida de los niños y las niñas que van a estudiar”.

Quienes defienden el uso indiscriminado de los agroquímicos suelen evitar el debate en relación a los efectos que producen en la salud de la población. Como dijo Casamiquela a este portal, los que viven en la tierra intoxicada son los pequeños y medianos ruralistas. Y el fuerte lobby de las empresas como Monsanto alcanza para silenciar a comunicadores, pseudo especialistas y sobre todo, gobiernos. El argumento suele ser siempre el mismo: que no está demostrada la relación causa – efecto entre las fumigaciones y las malformaciones o enfermedades que se registran entre los pueblos fumigados.

Para echar luz sobre un tema tan delicado vale recordar lo que publicó el sitio Iprofesional el 23 de marzo de este año: "Bayer sigue recibiendo malas noticias. La compañía alemana que el año pasado compró la multinacional estadounidense Monsanto sumó un nuevo caso judicial que ratificó el “factor sustancial” que el Roundup (herbicida elaborado a base de glifosato) tuvo en el cáncer desarrollado por el jardinero californiano Edwin Hardeman. Este fallo federal ratifica lo que ya había dicho un tribunal de California, sumando presión sobre el herbicida más famoso y más utilizado del mundo. (Nota completa acá)

O lo que consignó Infobae en la nota que lleva por título “Una niña murió en Corrientes por comer una mandarina contaminada con agrotóxicos” . (completa, acá)

O el caso de Fabian Tomasi, el más emblemático registrado en la Argentina, y prolijamente solapado por los grandes medios de comunicación: Murió Fabián Tomasi, un símbolo de los estragos que provocan los agroquímicos en el cuerpo

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