Para los platenses la figura de Federico Martelli es la más familiar entre los albertistas. Precandidato a intendente de la capital bonaerense y referente nacional del Movimiento de Unidad Popular (MUP), el postulante más joven del peronismo local reconoce que existe “no una corriente política orgánica, pero sí un grupo creciente de militantes y dirigentes que aporta un matiz que enriquece la unidad del peronismo”.

En diálogo con Info BLANCO SOBRE NEGRO, Martelli menciona a Santiago Cafiero como “un dirigente muy cercano a Alberto, pero también un cuadro político muy valioso que no necesita ser candidato para validar su rol como constructor de la unidad que todos esperábamos lograr”. Y destaca: “Es un compañero brillante”.

“Con Santiago (Cafiero) compartimos un encuentro en la casa de José “Pepe” Mujica junto a algunos dirigentes que viajamos a Uruguay con Alberto. A esa reunión lo voy a llevar siempre presente, no sólo porque estábamos con un ex presidente y un referente que ahora es candidato a serlo, sino porque fue la muestra más cabal de que la unidad de concepción de los movimientos populares y progresistas, es decir, que no resignan la autonomía de los países de la región, es imposible que desaparezca, es invencible", sostiene Martelli.

“Sobre Santiago Cafiero lo que hay que destacar es que como (el precandidato a Jefe de Gobierno porteño) Matías Lammens, forma parte de los emergentes del post kirchnerismo”, agrega.

“¿Hay o no hay un albertismo?” insistimos en la charla con el precandidato a intendente de La Plata. “Hay gran cantidad de dirigentes del Frente de Todos que no acompañaron a Unidad Ciudadana. Nosotros, es decir, quienes integramos el MUP y el Grupo Callao junto Santiago (Cafiero) y a tantos compañeros y compañeras, vemos por ejemplo en Matías (Lammens) una posibilidad de que la oposición dé pelea y sea competitiva en la Capital Federal. Después, si no se gana la discusión será otra. Creemos que Alberto abrió un nuevo espacio para que se integren cada vez más dirigentes y militantes que provienen de experiencias como el randazzismo, el massismo, o que se habían ido a su casa por la frustración que significó perder contra Cambiemos y que no se viera una salida como la que tiene el campo popular ahora”, opinó Martelli.

La figura de Lammens fue lo más disruptivo en el plano electoral que pusieron los Fernández sobre la mesa de debate electoral. Y sobre todo, en el terreno duro y áspero de la competencia porteña. ¿Podrá dar el batacazo? No se ve que exista un escenario proclive para semejante sorpresa, pero el actual presidente de San Lorenzo tiene por delante un futuro promisorio.

En esta breve campaña de cara a las PASO se mostró sólido en las entrevistas y muy seguro ante las cámaras de televisión. Utilizando lenguaje futbolero (ya que hacemos referencia a un hombre ligado a ese deporte) habría que decir que es -un jugador que sorprendió a todos y cualquiera querría tener en su equipo._

Santiago Cafiero preparó pacientemente junto a Martelli aquél encuentro con “El Pepe” Mujica, y entre ambos jóvenes dirigentes la afinidad no puede ser mayor. Otra dirigente del MUP La Pata, Cecilia Gómez Mirada, mientras el precandidato a jefe comunal platense recorre la Ciudad trabaja sin pausas en el búnker albertista .

“Hay tareas silenciosas que son estratégicas”, explica Martelli, y resume un concepto sobre el final del diálogo con este portal: “El peronismo es la casa de todos. La unidad es el primer triunfo que logramos, y (aunque parezca una exageración) fue un desafío contra nuestras propias limitaciones para alcanzar el escenario de unidad que finalmente lograron nuestros mejores dirigentes. Y quienes nos sentimos referenciados fundamentalmente con Alberto, somos una parte de este movimiento maravilloso que guste o no guste, es la única esperanza para la gran mayoría de nuestra sociedad. Con sus matices y su diversidad, así el campo popular y progresista es más rico y potente. Eso lo tenemos muy claro los tres, Santiago Cafiero, Matías Lammens y yo. Y Alberto , sabemos, es quien nos guía a todos, albertistas, cristinistas, nestoristas y a todos los que seguimos sosteniendo la necesidad de que Argentina sea un país industrializado, con un gobierno transparente y con una distribución del ingreso justa”.