En el Servicio Penitenciaron Bonaerense, como en toda fuerza de seguridad, no existen ni gremios ni otros canales de reclamo de los trabajadores ante las autoridades.

Por esa razón este lunes en diálogo con este portal la cónyuge de un profesional que cumple tareas en el área de Sanidad que tiene la Unidad 42 pidió que nos hiciéramos eco de los reclamos del personal de ese sector y que preserváramos su identidad. La preocupación de la mujer es que ella y otros parientes de empleados que trabajan junto a su esposo pertenecen a grupos de riesgo.

Allí cumplen tareas odontólogos, psicólogos, psiquiatras, traumatólogos, enfermeros, un infectólogo, que conforman un grupo de 14 personas.

De acuerdo al testimonio de la entrevistada este lunes hubo tranquilidad en el penal (la Unidad 42 de Florencio Varela), “porque el preso (Arakaki) estaba en el área de sanidad, no en el pabellón”.

También contó que "aislaron a otro preso que trabaja ahí, en Sanidad, que limpia, y los otros detenidos que estaban con Arakaki “siguen ahí sin síntomas, aunque observados”.

Además, la entrevistada señaló la precariedad con la que trabaja el personal que atendía la detenido.

“Una enfermera, por ejemplo, gana unos 30 mil pesos, los médicos y el resto del personal no tienen ni antiparras, y hay que tener en cuenta que en los días previos lo trataron (al preso) como un paciente normal, no como un enfermo de coronavirus, así que la preocupación es mayor aún”, concluyó.