El domingo, el intendente de Tornquist, Sergio Bordini, anunció que podrían reabrir restaurantes, cervecerías, casas de té y food truck. Se convertiría así en primer municipio en habilitar este tipo de actividad con la presencia de consumidores dentro del local. Dos horas después informó que la medida quedaba “postergada”.

Ubicado en el sudoeste bonaerense, Tornquist es uno de los municipios que no registra ningún caso de Covid-19. El distrito fue uno de los primeros en avanzar con las salidas de esparcimiento y ahora intentaba ser pionero en la habilitación de locales gastronómicos con ocupación de mesas y sillas.

Sin embargo, dos horas después del anuncio, el municipio informó que “por recomendación del Gobierno Provincial” se dejaba sin efecto la medida, por lo que los locales gastronómicos deberán seguir trabajando con la modalidad de delibery.

En La Plata, la Cámara de Empresarios Gastronómicos de La Plata (PULPA) convocó a una reunión para este lunes en Casa Frawens con el objetivo de elaborar un petitorio conjunto a las autoridades. Los comerciantes del rubro sostienen que con la modalidad de delivery, única autorizada hasta el momento, se puede alcanzar un porcentaje muy bajo de la facturación habitual.

Cómo era el protocolo

La medida estaba destinada sólo para los vecinos de Tornquist y se limitaba la capacidad de los comercios a 4 clientes cada 10 metros cuadrados. Además, las mesas debían estar dispuestas de manera tal que la distancia entre el respaldo de silla a silla fuese superior a un metro.

Los comercios solo podrían trabajar con el 50% de su ocupación habitual, con clientes que hubieran realizado reserva previa. Además se debía ofrecer productos de desinfección y garantizar la limpieza de todas las superficies.

Otro punto importante señalaba que quienes salieran en el horario nocturno debían regresar a sus hogares en forma obligatoria antes de las 24 horas.