La Suprema Corte de Justicia bonaerense ordenó admitir y gestionar el recurso extraordinario que había presentado Luis Federico Arias, por lo que ahora deberá revisar su destitución como juez en lo Contencioso y Administrativo. Por ese fallo, Arias pasó de ser un magistrado destituido a uno suspendido.

En diálogo con Info BLANCO SOBRE NEGRO, Arias aseguró: “Más allá del contexto político yo sé que en alguna instancia lo vamos a ganar. Si no es en la Corte de la Provincia será en la de la Nación y si no en la Corte Interamericana. Yo hice una seria advertencia a la Provincia de Buenos Aires sobre el sistema de enjuiciamiento de magistrados”.

“Los motivos por los que me desplazaron son todas decisiones jurisdiccionales y los jueces no podemos ser sometidos a juicio político por el contenido de nuestras sentencias. Es como la libertad de expresión para los periodistas, es una garantía de independencia”, remarcó Arias.

Y agregó: “Fue una modalidad del gobierno de Cambiemos perseguir jueces por el contenido de sus decisiones y que otros continúan. Por ejemplo el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, amenazó con someter a juicio político a quienes liberen presos sin importar si el magistrado cometió alguna irregularidad. Para revisar los fallos están las cámaras y la Corte. Ahora vuelven a la carga contra Violini”.

La denuncia que culminó con la destitución de Arias el 15 de agosto de 2018 fue impulsada por el Procurador General de la Suprema Corte, Julio Conte Grand, propuesto por la ex gobernadora María Eugenia Vidal para ese cargo luego de haber sido secretario Legal y Técnico de la Gobernación.

El Jurado de Enjuiciamiento estuvo integrado por Julio Pettigiani (por entonces presidente de la Suprema Corte), Jorge D’Onofrio (diputado del Frente Renovador), Walter Carusso (diputado de Cambiemos) y Roberto Costa (senador de Cambiemos); los abogados Fabián Ramón González (representante del Colegio de Morón), Diego Alejandro Molea (Lomas de Zamora), Osvaldo Enrique Pisani (San Isidro), Ambrosio Luis Bottarini (Pergamino) y José Alberto Apaz (San Martín), mientras que los legisladores Santiago Révora (Unidad Ciudadana) y Pablo Garate (Frente Renovador), votaron en sentido contrario a la destitución.

“Cada vez que una decisión de un juez no gusta, amenazan con juicio político. Eso es lo que hicieron conmigo a pesar de que todos mis fallos fueron protectorios de derechos esenciales. Por eso las organizaciones de Derechos Humanos plantearon mi caso ante las Naciones Unidas y el relator García Sayán pidió un informe”, aseguró Arias en la entrevista con Info BLANCO SOBRE NEGRO.

Y advirtió: “Esto no puede seguir sucediendo. Es normal que haya tensiones entre los poderes del Estado, lo raro es que no existan. Creo que también es necesario plantear la necesidad de crear un observatorio judicial que vele por el cumplimiento de los plazos y de los estándares internacionales. Mi juzgado era uno de los pocos que estaba al día”.

El fallo del máximo tribunal bonaerense no implica la restitución de Arias a su cargo como juez Contencioso Administrativo Nº 1 de La Plata pero abre paso a la revisión del proceso de destitución que estará a cargo de la propia Suprema Corte. Esta instancia había sido rechazada por el jury que estuvo a cargo del enjuiciamiento.

“Voy a hacer todo lo posible para revertir mi destitución por una cuestión moral. En el momento en que suceda veré si decido volver a ser juez o no”, adelantó Arias.

Sobre las posibilidades ciertas de que sea restituido, comentó: “Ahora hay un contexto político distinto. Alberto Fernández es un jurista y tiene la convicción de que no debe haber intervención del Ejecutivo sobre la Justicia. Eso es alentador porque se puede ejercer la magistratura con mayor libertad e independencia”.

“De todos modos debe haber una reforma política del sistema judicial para equilibrar las relaciones de fuerza porque no solo los gobiernos ejercen presión sobre los jueces sino también la prensa dominante y el poder económico”, aseguró Arias, y agregó: “Debemos lograr que la sociedad pueda tener peso en las relaciones de fuerza para que los jueces no queden a merced de los poderes fácticos y constituidos”.

“La verdadera razón de mi destitución fue haber afectado los intereses económicos de las energéticas que estaban asociadas al poder político. Fueron uno de los grandes ganadores durante el macrismo. En la Provincia, por primera vez un solo grupo se quedó con las cuatro empresas de distribución. La suspensión de los tarifazos les provocó una pérdida enorme”, concluyó Arias.