El título de la nota es “La regulación es clave”, con lo cual la especialista deja sentada una posición: luego de tantos años desde que empezó a funcionar, no hay todavía un marco regulatorio adecuado.

La economista advierte que:

- “El servicio de telefonía móvil ha ampliado enormemente su cantidad de usuarios en los últimos años, pero ese desarrollo no fue acompañado por una mejora en la calidad del servicio”.

- “Las inversiones de las compañías para optimizar la utilización del espectro radioeléctrico, del que disponen por concesión, casi no se han incrementado durante los últimos 14 años”.

De acuerdo con estimaciones del sector en base a antecedentes internacionales, la cifra recaudada podría llegar a los 3 mil millones de dólares. --* "Un documento de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia refleja que (el mercado) está repartido entre apenas cuatro empresas: Telefónica-Movistar (47 por ciento), Telecom-Personal (26), Claro (18) y Nextel (9 por ciento).

- “En la última década, la cantidad de líneas activas pasaron de 4,5 a 45 millones. Esto es una tendencia mundial, pero en nuestro país el consumo que más se incrementó fue el de equipos y servicios de alta gama, lo cual también ratifica las mejoras de las capacidades adquisitivas en todos los tramos de ingresos. El Estado ha garantizado un mercado que propicia las ganancias empresarias y que es capaz de absorber los productos que se comercializan”.

- “Por eso, la concesión del nuevo espectro debe implicar fuertes compromisos de inversión y de supervisión. Las compañías hasta ahora responsabilizaron al Estado por la baja calidad del servicio, omitiendo su responsabilidad en la distribución, tal como se establece desde la concesión del espacio radioeléctrico. La inversión en nuevas antenas de cobertura y radiobases ha sido muy baja”

- “En nuestro país, una antena es responsable de la conexión de 4092 líneas, mientras que la media internacional es de 348 líneas por antena (San Pablo 1947; Santiago de Chile 865)”.

- "Las cuatro compañías líderes comparten un promedio de reinversión en función de ganancia de menos del 10 por ciento, mientras que la media mundial es de 25 por ciento.

- "Argentina está en el cuarto lugar de los países con tarifas más caras.

Escrito en el diario más oficialista, sólo queda destacar dos puntos de los mencionados por sobre los demás y que explican en parte la pésima calidad de la telefonía celular argentina: acá, una antena es responsable de la conexión de 4092 líneas, mientras que la media internacional es de 348 líneas por antena (San Pablo 1947; Santiago de Chile 865) , y por si faltaba algo más para indignarse, la última conclusión es lapidaria: “Argentina está en el cuarto lugar de los países con tarifas más caras”.

No son datos publicados en el diario de Magnetto. El problema, como suele suceder, es que el Estado ha tenido políticas deficitarias, y la solución, a pesar de los anuncios sobre tecnología móvil 4G, sigue siendo la misma de siempre: regular a las empresas, proteger al usuario, atender sus reclamos, canalizarlos, y garantizar un servicio eficiente.