martes 23 de abril de 2024 - Edición Nº -1966

Información General | 28 sep 2014

"Agarramos a los perejiles", dijo

En esta guerra contra las drogas ganan los narcos, según el padre Molina, titular del SEDRONAR

El titular de la SEDRONAR, Juan Carlos Molina, afirmó hoy en la 46° Asamblea General Extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) que hay que “escuchar las diferentes preocupaciones de los países de la región y reconocer las condiciones socio-económicas de los afectados, a la hora de diseñar políticas claras para abordar el problema de las drogas”.


“Es necesario un debate amplio, multilateral y sincero que contemple las distintas realidades de los Estados”, continuó Molina, ya que “el problema de las drogas en América tiene implicancias políticas, económicas y sociales, y es por ello un fenómeno complejo, dinámico y multicausal que nos exige un abordaje integral, equilibrado y multidisciplinario”.

En este encuentro regional que se está realizando en Guatemala, Molina expuso la posición argentina respecto al abordaje de los consumos problemáticos, desde la perspectiva de los derechos humanos y la inclusión: “La Argentina no busca solamente ‘la reducción del daño’ en la salud, sino que el objetivo es crear las condiciones y oportunidades necesarias para lograr una plena integración social que permita a las personas soñar con un proyecto de vida en el cual desarrollarse plenamente”.

Y agregó: “La Argentina de hoy considera a las adicciones como un problema de ‘salud social’ que con el objeto de reconstruir los lazos sociales y debe involucrar a todos los actores sociales, al individuo, la familia y a la comunidad”.

Durante su exposición, el secretario de la SEDRONAR aseguró que “el paradigma de ‘guerra contra las drogas’ imperante durante más de 40 años ha fracasado en sus objetivos” y “como consecuencia, el paradigma represivo ha estigmatizado al consumidor de drogas, generando una asociación errónea entre droga y delito y, más preocupante todavía, la criminalización de la pobreza”.

En esa línea, reclamó un cambio en relación a la mirada discriminatoria sobre quienes atraviesan una situación de consumo problemático.

“Hay que terminar con la estigmatización y la marginalización de los consumidores y de los eslabones más bajos del cultivo, la producción y la distribución, así como tratar a las personas con consumo problemático de sustancias como lo que son, ante todo personas y no delincuentes”, sostuvo Molina.

El titular de la SEDRONAR también se refirió a la necesidad de profundizar la perspectiva de Derechos Humanos en las resoluciones de la Asamblea General, para no retroceder “respecto a los avances logrados en los últimos años”.

Sobre este tema, resaltó la importancia de la Resolución sobre promoción y protección de los derechos humanos en la búsqueda de nuevos enfoques y soluciones efectivas en el desarrollo e implementación de políticas para atender el problema mundial de las drogas en las Américas, que la Argentina copatrocinó.

Por último, Molina aseguró que la Sesión Especial de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre Drogas (UNGASS), a realizarse en 2016, es una “oportunidad histórica para seguir reflexionando y discutir las limitaciones del régimen de control de estupefacientes, identificar alternativas viables y alinear el debate a las discusiones en curso sobre la agenda de desarrollo y derechos humanos”.

*En horas de la tarde, Molina siguió con el debate. “No estamos agarrando a los grandes narcotraficantes, sino a los perejiles”, aseguró , y adelantó que se enviarán tres proyectos al Congreso para cambiar las leyes vigentes.

En diálogo con radio Nacional Rock, el padre Juan Carlos Molina, aseguró: "La Sedronar no sólo se dedica a la prevención sino que tenemos equipos técnicos que trabajan en serio con este tema”

Uno de los proyectos que se enviará al poder legislativo es sobre el consumo de drogas. Molina explicó: "No llamamos despenalización porque no es ese el proyecto, sino que hay hablar de la no criminalización. Es reformular la ley que hoy existe. Estamos buscando en la legalidad algo que ya es legal. Hoy el que consume no va a preso supuestamente por un fallo de la Corte Suprema" y recordó: “40 mil pesos sale un mes de una persona presa”.

“El procedimiento de la Policía cuesta 1200 millones de pesos. Ese dinero tiene que ir en la lucha contra el tráfico. No estamos agarrando a los grandes narcotraficantes sino a los perejiles”, remarcó Molina en el programa El fin de la metáfora.

(Prensa SEDRONAR y agencias)

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias