La República del Paraguay está viviendo por estas horas una serie de conflictos que se dan en el contexto de traspaso de mando del presidente liberal Federico Franco al electo Horacio Cartes, del Partido Colorado.

A las huelgas de los transportistas públicos que reclaman el pago de los subsidios atrasados; a la sentata de los gremios docentes en las calles de Asunción presionando a los diputados para que modifiquen el proyecto de ley de jubilaciones; y al reclamo de los indígenas por tierras y la no utilización de semillas transgénicas, ahora se suma el posible atentado del EPP contra el nuevo representante del gobierno paraguayo.

Carmelo Caballero, responsable del ministerio del Interior, declaró que temen que el grupo guerrillero EPP aproveche la oportunidad de asunción del nuevo Presidente, previsto para el próximo jueves, y concrete una operación terrorista que le sirva de difusión de sus actividades clandestinas.

La ceremonia, en la cual están confirmadas 80 delegaciones internacionales, contará con gran cantidad de efectivos de las Fuerzas Armadas para “reducir al máximo la posibilidad de esos ataques”, declaró el funcionario guarani.

Francisco Franco, quien accedió a la presidencia de Paraguay luego de la destitución de Fernando Lugo en junio de 2012, entregará el poder a Horacio Cartes, en el contexto de una nación con muchos conflictos sociales por resolver. Es preciso señalar que ese día no solamente las autoridades temen un posible ataque del EPP, sino que también los gremios docentes convocaron a una movilización para que tengan en cuenta sus reclamos; pretenden alcanzar los 15 mil docentes en las calles.

Paraguay se divide territorialmente en 17 Departamentos y el Distrito Capital, donde tienen asiento las autoridades nacionales.

El EPP es una organización terrorista surgida en el año 2008, que opera en algunos de los Departamentos. Principalmente, las tareas delictivas las desarrollan en la región noroeste del país. El grupo tiene una orientación marxista-leninista y ha sido responsable de secuestros, asesinatos y ataques, por lo que es considerada como una organización terrorista por el Estado Paraguayo.

Por Juan José Pfeifauf