viernes 19 de abril de 2024 - Edición Nº -1962

Información General | 18 sep 2013

Otra que Madagascar

Descontrol y desidia en el zoológico platense

Trabajadores del Jardín Zoológico y Botánico de La Plata denuncian graves problemas de infraestructura, malas condiciones para los animales y los trabajadores, falta de políticas educativas y hasta tráfico ilegal de especies


Por: Martín Mazzoleni
Desde hace años, ambientalistas vienen denunciando las malas condiciones en que se encuentra el Jardín Zoológico y Botánico de La Plata. Luego de las inundaciones se destapó públicamente una situación que, según los trabajadores, lleva varios años de decadencia. Infoblancosobrenegro.com entrevistó al jefe de cuidadores, Martín Levach y contactó a un especialista en conservacionismo para pensar en posibles soluciones a la problemática.

La posibilidad de ver a animales extravagantes en medio del casco urbano remite a épocas de exhibicionismo circense. Pero las nuevas tendencias apuntan hacia parques zoológicos que sean representativos de la fauna regional y que desarrollen políticas educativas claras. Lejos de esta corriente, el Zoo de La Plata es un recinto anacrónico que enjaula, en condiciones deplorables, a elefantes, tigres de bengala, leones, suricatas, hipopótamos y bueyes de la India, entre otros ejemplares exóticos.

“Hemos hecho denuncias de infraestructura, sobre todo en los últimos 6 de gestión. Los animales están en situaciones, que muchas veces los ha llevado hasta la muerte, como le pasó a la jirafa hace 3 años”, cuenta Levach. La jirafa macho Gahli estaba confinada en un ambiente con mucho barro porque no escurría el agua y presentó problemas de hipotermia en las patas traseras.

Por otra parte, el cuidador denunció que desde enero no hay gas en el zoológico: “Ya en marzo avisamos, pero llegó el invierno y no se hizo absolutamente nada. Los monos necesitan del calor porque son animales tropicales”. Finalmente, los trabajadores del predio se movilizaron y consiguieron caloventores por su cuenta. Actualmente utilizan gas envasado porque las líneas eléctricas no daban abasto.

El colmo de la situación se dio el 8 de abril. En medio del operativo desplegado para sacar animales luego de las inundaciones, llegaron 10 flamencos sin papeles. “Se sabe que vinieron de una laguna, pero no de cuál. Cayeron sin ningún criterio”, cuenta Levach. Cada movimiento de animales en parques zoológicos exige la presentación de documentación en la Dirección de Flora y Fauna de la provincia. “Se hizo un acta de infracción, estamos esperando que la Dirección de Fauna de la provincia reaccione y devuelva los animales a la naturaleza, de donde salieron”, concluye el cuidador.

Respecto al agravamiento de la problemática luego de la catástrofe climática, Levach aseguró que el zoo “ya venía muy destruido” y que a pesar de la variación de directores “no cambió nada realmente”. El trabajador afiliado a ATE expresó: “Hay falta de inversión desde hace muchísimo tiempo y además no hay política institucional, no hay investigación, no hay educación y no existe política de conservación. No hay políticas que sustenten al zoológico”.

Además, Martín Levach sostuvo que había grandes falencias en las condiciones de seguridad para los trabajadores: “Hay ambientes que están marcados por Fauna de la provincia para que se arreglen con urgencia y no se está haciendo nada. Hay dos ambientes que son muy peligrosos, que son el del elefanta Pelusa, el animal emblemático del Zoo, y el del chimpancé”. En noviembre de 2011, un informe de ministerio de trabajo había advertido sobre estas circunstancias.

Sobre las protestas de los ambientalistas que piden el cierre del zoo platense, el jefe de cuidadores dijo que ellos también peleaban por la mejora de las condiciones para los animales. Sin embargo, sobre la liberación de ejemplares, Martín Levach aclaró que “son proyectos largos que llevan muchas herramientas y muchos años de investigación” y sentenció: “Si se quiere liberar un animal donde avanzan los campos de soja, con el ecosistema destruido, es llevarlo a la muerte”.

Nuevas tendencias

El biólogo especializado en conservacionismo Andrés Freisztav explicó que la mayoría de los zoológicos modernos tienden a tener los animales en la mayor libertad posible. “En lugares como Argentina, para contribuir a la conservación, tendría mucho más sentido que se haga educación ambiental. Donde el eje no sea reproducir animales, conservarlos genéticamente, sino la educación a la población y a las escuelas”, especificó Freisztav, ex vicepresidente del Parque Nacional Lanín.

“El concepto viejo era cuanto más raro mejor y el nuevo es: cuanto más representativo de ambientes regionales, mejor, para que tenga que ver con conservación de la realidad donde la gente vive”, analizó Freisztav.

Sobre los zoológicos abiertos, el especialista dijo que “tienen ventajas para el animal, y educativas, es bueno para los dos fines: conservación y educación”. Respecto al zoo local, Freisztav opinó que “está ubicado en un predio de lujo, que tiene una población arbórea muy rica y se podría convertir en un paseo botánico o quizás una granja educativa”.

Respecto a esta nueva línea que se podría imponer en el zoo platense, Martín Levach expresó: “Estamos planteando cuestiones de visitas guiadas al botánico. Todo lo que es zoo urbano se plantean granjas educativas” y sostuvo que el problema actual es la “falta de un plan de educación real y serio, teniendo en cuenta que el zoo cumple un rol social que no es solo para exhibir animales”.

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias