El chofer del transporte de caudales de la empresa Prosegur asaltado en la calle 44, entre 25 y 26 de La Plata, frente a una sucursal del banco Santander Río, el pasado 14 de agosto fue detenido ante la sospecha de que actuó como “entregador” en este robo en el que se llevaron más de cinco millones de pesos, informaron hoy fuentes policiales.

Las claves para que la fiscal platense Betina Lacki lograra que el juez de Garantías Guillermo Atencio ordene la detención de Peterlana fueron los videos de las cámaras de seguridad, escuchas telefónicas y las declaraciones de los propios vigiladores compañeros del chofer.

El millonario botín fue de 4.779.657 pesos en efectivo, 73.000 dólares estadounidenses y 312.236 en valores varios y, pese a que ayer allanaron la casa del imputado, aún no se secuestró nada de ese dinero.

Peterlana quedó preso por el delito de “hurto calificado”, con una pena de uno a seis años de prisión, ya que el juez consideró que no fue un robo porque no hubo violencia en las cosas o personas, aunque también le imputan asociación ilícita y encubrimiento, lo que podría elevar la pena ante una eventual condena.

Un jefe policial que participó de la pesquisa aseguró que los dos ladrones que intervinieron en el hecho “actuaron sobre seguro, sin efectuar un sólo disparo”.

Al prestar declaración luego del asalto, Peterlana había dicho que lo encañonaron por la tronera del camión, que estaba abierta.

Sin embargo, uno de los jefes policiales a cargo de la investigación reveló que el análisis de las cámaras de seguridad permitió establecer que la conducta del chofer “se contraponía en muchos aspectos con los protocolos de actuación fijados por la empresa” y que “sus dichos no se condecían en lo más mínimo con las imágenes”.

El informante explicó que a los delincuentes, lejos de tener que esgrimir un arma de fuego, como había declarado la supuesta víctima, les alcanzó con una simple seña y un golpe con la mano en el costado de la unidad para que se les abriera la puerta.

Además, casi simultáneamente con el abordaje de los ladrones, el chofer Peterlana inició la marcha del blindado por la avenida 44.

En la causa, la fiscal Lacki realizó una recreación del abordaje del robo donde, según los investigadores, quedó claro que la puerta que separa la cabina del chofer con el sector donde se ubica la custodia estaba abierta cuando, por protocolo, debe permanecer cerrada.

También se informó que Peterlana no pudo explicar el hecho de que pese a que hubiera sido amenazado con armas largas, aunque esto no se ve en los videos, por las características que posee la unidad, es imposible que pueda ser vulnerada por el disparo de un arma convencional.

La fiscalía cuenta en la causa con las declaraciones de todos los integrantes de la dotación del camión blindado, donde los propios compañeros de Peterlana hicieron surgir algunas dudas en cuanto la actitud del chofer.

Los pesquisas lograron en estos tres meses escuchas telefónicas en las que se comprobó la presunta vinculación del chofer con el asalto, y que “personas de su entorno le recriminaron su participación en el hecho”, según explicó uno de los investigadores consultados.

La detención de Peterlara fue concretada por personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de La Plata, junto a efectivos de la comisaría 4ta., quienes allanaron su casa en la calle 520 entre 158 y 159 de Melchor Romero.

Allí, secuestraron celulares y computadoras, pero no se halló dinero que pueda pertenecer a parte del botín.

EL ASALTO

El robo al blindado ocurrió alrededor de las 17 del 14 de agosto en la puerta de la sucursal San Cayetano del banco Santander Río ubicado en avenida 44 entre 26 y 27.

Dos ladrones se subieron al camión de Prosegur y junto al chofer llevaron la unidad hasta la intersección de las calles 46 y 28 donde estacionaron y se apoderaron de las once sacas que contenían más de cinco millones de pesos.

Los ladrones se subieron a un Peugeot 207 que los esperaba y con ese auto dirigieron hasta la calle 43 entre 30 y 31 donde hicieron un segundo trasbordo en un Peugeot 206 negro con el que escaparon.

Además del dinero, los ladrones se robaron del blindado una pistola Browning 9 milímetros y dos escopetas calibre 12/70, una de las cuales fue hallada en el auto Peugeot 207 que quedó abandonado.

Télam