Nos preguntábamos en INFOBLANCOSOBRENEGRO por qué extraña razón, en tan sólo cuatro días, pudimos recolectar más de una decena de versiones en torno del futuro de Sergio Massa, del Frente Renovador y de su referente local José Arteaga.

“En política hay hombres y mujeres que tienen convicciones, y también hay hombres y mujeres que tienen precio”, nos dijo Arteaga.

“Está bien, la frase describe con justeza a la política argentina, pero algo pasa en el Frente (Renovador), cada vez hay más versiones, y ninguna gira en torno de un escenario para el massismo más favorable que el actual ", le respondimos.

“Yo palpo en la calle que la pelea de fondo es ente el oficialismo municipal y nuestra propuesta, la que venimos trabajando con Juan (Amondarain) y un conjunto de adherentes y militantes que crece semana tras semana”, nos dice Arteaga.

“Está bien, eso es en el plano local, pero en la Provincia, menos campaña electoral, en el Frente Renovador pasa de todo”, insistimos. Terminamos el diálogo analizando lo que vendrá y lo que se fue.

En conclusión, compartimos preguntas, y nos fuimos – quienes hacemos este portal – con la sensación de que un punto de inflexión determinante había transformado al massismo en otra cosa, en un sujeto político transformado, con un rol que en el corto plazo deberá ser definido con precisión.

Cristina ama a los arrepentidos

La foto del jefe comunal de Merlo, Raúlo Othacehé, posando como un niño que sopla su torta de cumpleaños junto a Wado De Pedro y Julio De Vido, fue el tweet más impactante del día. “Vuelvo al Peronismo de la mano de Cristina”, posteó el “barón” (sí con “B” larga, no jodan) del conurbano.

Nótese que no apareció junto a devotos de su nueva grey (y vieja, al mismo tiempo), o sea, NO de la mano de Daniel Scioli o de otro hombre del peronismo bonaerense más “moderado”, o distante de la Casa Rosada. El tipo dijo: si la hacemos la hacemos bien: “… de la mano de Cristina”, metió

Lo del hombre fuerte de Merlo da cuenta del proceso de desgaste que sufre Sergio Massa desde que los hombres de negocios más poderosos de la Argentina le quitaron el banquito. Aman a Macri: es previsible, servicial y buen exponente de la nueva derecha promovida por los países más poderosos para los pueblos de América Latina. Todo eso ya se ha dicho.

Lo que desde el lunes circula un poco como información y otro poco como operación es una suerte de diáspora de dirigentes hacia otros partidos (Darío Giustozzi es el ejemplo más notorio), sumado a un lento retorno de dirigentes que se fueron del FpV y ahora temen perder sus distritos a manos del kirchnerismo.

Esta tarde circulaba con mucha fuerza la versión de que los intendentes de San Martín, Gabriel Katopodis, y de Olavarría, José Eseverri, negocian el eventual regreso al PJ bonaerense de la mano de Julián Domínguez, el precandidato a gobernador que asoma con mayor nitidez en el espacio oficialista.

Piden que Massa – según una fuente – compita con una boleta “corta”, es decir, donde el hombre de Tigre vaya como candidato a Gobernador y De Narváez (si lo convencen) de Vice. De esa manera, suponen, en los distritos donde el massismo ganó en 2013 podría reeditarse el frente que pateó el tablero bonaerense, donde se sumaron los votos del FR y el PRO. En aquella oportunidad el macrismo no jugó con candidato a la Gobernación, y el Frente Renovador se quedó con esa gruesa franja del electorado.

Ahora tampoco tiene candidato competitivo el Jefe de Gobierno porteño, ese es su talón de Aquiles. Los renovadores que gobiernan distritos importantes lo saben , y perciben que esa puede ser la salida. Algunos dicen que a esa estrategia la están proponiendo, otros que la están imponiendo. Suena parecido, pero son cosas bien distintas.

Como sea, los tiempos políticos previos a las PASO tienen una dinámica previsible pero arrolladora a la vez. Todo puede ocurrir, y el final está más abierto que nunca. Los grupos económicos juegan el partido fuera de la cancha, pero patean como defensores de clubes recios del Nacional B. La dirigencia política, en tanto, vive sus horas más tensas y recorre el final de la prehistoria de lo que vendrá.