En un nuevo capítulo del conflicto, el personal de las fuerzas federales comenzó a secuestrar los autos de los manifestantes, que circulaban a a paso lento como método de protesta.

En ese contexto, comenzaron los incidentes cuando agentes de Gendarmería desalojaron a los manifestantes y dispararon balas de goma.

Cabe aclarar que cada semana la caravana de vehículos sobre la autopista se desplaza lentamente para exigir sus demandas. Pero hoy, a diferencia de otras manifestaciones, se produjo el desalojo y el secuestro de vehículos, lo que desató el momento de quiebre y tensión entre las partes.

El diputado nacional por Mendoza Nicolás del Caño, del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), manifestó a C5N que los agentes reprimieron con dureza mientras los trabajadores reclamaban por la reincorporación de 35 obreros despedidos. “Es una vergüenza. El gobierno de los derechos humanos tirándole a los trabajadores”, expresó.

El 28 de mayo Lear suspendió por tiempo indeterminado a 330 trabajadores, de los cuales unos 100 fueron despedidos.

Ello derivó en una serie de cortes en la Panamericana, algunos de los cuales terminaron con fuertes choques y la represión de fuerzas de seguridad.

Luego, la empresa dictó más cesantías, y los operarios llevaron la protesta al Ministerio de Trabajo de la Nación, donde lograron algunas reincorporaciones.

A la fecha quedan por reincorporar 35 trabajadores.