“Preocupación del Colegio de Ingenieros de la Provincia ante la versión que indica que instalarán antenas de telefonía en dependencias del Ministerio de Salud”, reza un comunicado de la entidad difundido esta mañana. También mencionan “un convenio” que estaría vigente y en proceso de avance (según averiguamos, con la empresa Personal).

El Presidente del Colegio de Ingenieros de la Provincia, Distrito V, Gabriel Crespi, mostró su preocupación ante el trascendido e indicó que “debe haber un análisis exhaustivo y mediciones de impacto, ya que la instalación de antenas en estas áreas podrían alterar el funcionamiento de los equipos de electro-medicina instalados en los Centros Asistenciales”.

El titular del Colegio Profesional agregó: ”Los perjuicios de las ondas electromagnéticas a los seres humanos, aún no está probados, no hay estudios concretos que demuestren efectos perjudiciales en la salud. Pero sí estamos en condiciones de afirmar que todo este tipo de instalaciones, sin la supervisión de profesionales idóneos, pueden generar interferencias en los equipos médicos”, .

“Debemos estar alertas porque estas antenas generan ondas que pueden modificar las mediciones de los equipos utilizados en los hospitales. Para ejemplificar la gravedad de la situación, hay que pensar los problemas que pueden tener los pacientes, cuando las prescripciones médicas estén basadas en mediciones alteradas de los equipos. Esto también puede ser muy problemático para los profesionales médicos a la hora de hacer un diagnóstico apoyado en lecturas erróneas. Exhortamos a las autoridades provinciales a que en caso de que se lleve a cabo esta iniciativa, se contemple la fiscalización cotidiana por parte de ingenieros matriculados, especializados en la materia” finalizó.

El área de prensa del ministerio de Salud reconoció que en este momento está “en trámite” el convenio entre Personal y la Provincia.

El convenio se denomina “Plan estratégico de conectividad en materia sanitaria”. Establece que la firma de telefonía se compromete a “aportar la infraestructura necesaria para optimizar las comunicaciones móviles orientadas a la sanidad”.

“En esa línea – agregaron – el objetivo es desarrollar un mejor sistema de comunicación entre los 78 hospitales bonaerenses, y ofrecer Internet inalámbrica (wi-fi) en sus salas de espera. El único fin es aprovechar los avances tecnológicos para ofrecer una atención en salud más eficiente. Se pretende dotar a todo el sistema de salud de un ancho de banda que acelerará la interconexión vía web”.

Además, una de las responsables de Prensa desestimó la preocupación del Colegio de Ingenieros con el argumento de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) no pudo constatar que las antenas de telefonía celular e internet “generen riesgo para la salud”.

Con relación al problema que podrían producir dichas antenas en los aparatos de alta complejidad que utiliza el cuerpo médico de cada hospital, prefirieron no dar respuestas, e insistieron: “Todo lo que teníamos para decir ya lo dijimos”. Pues bien: en un mail dirigido a este portal, lo que informaron, vale aclarar, es lo que consignamos párrafos arriba: “El convenio está vigente”.

La polémica recién empieza, y hay preguntas que quedan por responder: ¿Aunque la OMS no “constató” que las antenas produzcan daños a la salud, qué valor tienen los estudios que afirman lo contrario?, y ¿ese organismo es, acaso, una autoridad indiscutible en la materia?

¿No es más importante una opinión clara y contundente de parte del ministerio de Salud que de la OMS? Y otra: ¿Por qué no desmienten al Colegio de Ingenieros cuando éste afirma que la instalación de antenas en hospitales podrían alterar el funcionamiento de los equipos de electro-medicina instalados en los centros asistenciales?”.

Más aún: especialistas aseguraron a INFOBLANCOSOBRENGRO que “la intensidad con la que transmiten datos esas antenas está ligada a los efectos que producen en la población, por eso recomiendan instalarlas a una distancia no menor a cien metros de hospitales y escuelas, y a baja potencia”.

Un dato es insoslayable: pese a los reclamos, el convenio avanza sin audiencias públicas y pese a las quejas no sólo del Colegio de Ingenieros, sino también de ambientalistas, legisladores y concejales.

Marcelo Martínez, titular de la ONG Nuevo Ambiente, opinó que “es una irresponsabilidad poner antenas en establecimientos sanitarios, porque la OMS no dijo que son contaminantes, pero tampoco demostró lo contrario, como todos los organismos serios que analizaron el tema. Es más, hay especialistas que, incluso, recomiendan no instalarlas en áreas pobladas”.

Y recordó que “en un edificio ubicado en esta región, una antena durante una tormenta eléctrica captó un rayo que destrozó todos los electrodomésticos de los departamentos”. Y concluyó: “¿Qué pasaría con los aparatos de alta complejidad de los hospitales, en caso de verse afectados por una situación de esa naturaleza?”.