Por: Redacción Info Blanco Sobre Negro

La Dirección de Espacios Verdes de la Municipalidad de La Plata evitó que un jacarandá de aproximadamente 30 años que iba a ser extraído pueda seguir floreciendo en el Parque San Martin. 

Todo comenzó, según le contó el director de Espacios Verdes comunal, Osvaldo Minervini, a Info Blanco Sobre Negro, a raíz de la presentación de un frentista en la Dirección de Obras Particulares para que se quite el árbol, ya que obstruía su garage. 

"Cuando alguien se presenta con plano aprobado no queda otra que extraer la planta, algo que forma parte de un error histórico", comentó Minervini, y agregó que en esa situación nunca debería haberse aprobado el plano. 

 

El Jacarandá en el Parque San Martin

 

"Al observar que el árbol estaba en buen estado se definió su traslado, tarea que se hizo en conjunto con el frentista, quien se hizo cargo de reducir la copa y luego nosotros, con una retroexcavadora, lo levantamos", detalló el funcionario. 

"Previamente, realizamos un pozo en el Parque San Martin, sobre el costado que da a la calle 50 entre 25 y 26, y luego trasladamos la especie en un camión", relató Minervini.

El árbol fue colocado al lado de los lapachos, que florecen antes que los jacarandás, con el objetivo de que haya más color "en un espacio público donde hace falta".

Luego de su colocación, los trabajadores rellenaron el pozo con tierra negra y lo regaron, tarea que realizan habitualmente y en la que colabora, con un camión, la empresa ABSA. 

"Ahora viene una nueva etapa y hay que ver cómo reacciona. En el traslado tratamos de conservar la mayor cantidad de raíces que fuera posible y que la copa esté equilibrada"., agregó Minervini.

 

Urbanismo y naturaleza

La entrevista con el director de Espacios Verdes devino en un planteo por parte de este último con relación a la aprobación de los planos de las casas y edificios locales. 

"Como Obras Particulares se remite a lo urbanístico y no a ver si hay un árbol en la vereda, el plano se aprueba y después el frentista pide que saquen la planta porque obstruye el estacionamiento, y con el plano aprobado no te podés negar", detalló Minervini, y aseguró que están trabajando entre las dos áreas para cambiar el enfoque. 

"Si bien la ordenanza establece que si se quita un árbol hay que plantar tres tilos, eso no remedia la extracción", puntualizó el director comunal. 

 

Cambio de perspectiva en materia de poda 

"Los árboles no tienen necesidad de ser podados", aseguró el funcionario, y agregó que "la intervención hay que evaluarla caso por caso".  "Trabajamos para que se entienda esto e integrar el árbol al ambiente urbano. Frente a un pedido de poda, hay que ver si la planta lo pide o no".

Bajo este postulado, el Municipio comenzó a realizar en mayo pasado distintos trabajos de poda en el Partido, centrándose en casos donde el arbolado público se encuentra muy deteriorado, enfermo, con peligro de caída o desrame o si su desarrollo interfiere en el normal funcionamiento de los servicios públicos. 

“Los cortes de raíces mal realizados, las podas mutilantes e ilegales que se hacen sin consideraciones técnicas, la falta de reposición de árboles, las forestaciones sin su debido mantenimiento y cuidado y la reparación de veredas sin respetar el arbolado han producido daños irreversibles y han dejado árboles sobre maduros con gran potencial de caída y desrame”, explicaron en su momento desde la gestión local.

 

Sobre el Jacarandá 

El árbol adulto alcanza una altura de 12 a 15 metros, hasta 20 metros en condiciones favorables. Las raíces, de desarrollo oblicuo, iguales y fasciculadas, no son invasoras, por lo que cuando se presenta un periodo de escasez de agua el árbol se ve muy mal.

La copa del jacarandá no tiene una forma uniforme: algunas veces en forma de una sombrilla, algunas veces de forma piramidal, pero nunca densa. En general, forma una copa ovoide e irregular. La estructura es de ramificación principal extendida. La copa, de forma natural, alcanza un diámetro de 10 a 12 metros.

Las flores, de 4 a 5 cm, están agrupadas en panículas terminales erectas, de 20 a 30 centímetros y son de color azul violeta. Tiene la corola con tubo muy retorcido y los 5 pétalos soldados. Los lóbulos de dicha corola son algo desiguales y organizados en 2 labios, uno de 2 lóbulos arriba y el inferior de 3.